Coloca la quinoa en un colador con un recipiente por debajo y llénalo de agua hasta cubrir completamente.
Remueve con las manos o una cuchara constantemente.
Escurre el agua y repite el procedimiento. Para asegurar que eliminas toda la coberetura amarga, debes repetir este proceso de 4 a 5 veces hasta que el agua salga cristalina.